Si un pájaro te dice que estás loco, debes estarlo, porque los pájaros no hablan». Esta frase atribuida a Confucio, esconde algunas verdades. Los que hacemos Litoral estamos completamente locos, porque todos los pájaros que aparecen en estas páginas, imaginados, escritos, fotografiados o pintados, en algún momento nos han hablado y nos han dicho, entre otras verdades, que habíamos perdido la razón.
¿Qué otra cosa te puede decir un pájaro cuando estas haciendo una revista de poesía?
Pero esto viene de lejos, el mascarón de proa del barco de Jasón, el Argo, estaba hecho de roble del bosque sagrado de Dodona y podía hablar en sus viajes con todo tipo de aves. Y que filósofos griegos como Demócrito o Anaximandro sabían interpretar perfectamente el lenguaje de los pájaros. Y que Dag el Sabio, legendario rey vikingo, hablaba con naturalidad con toda criatura alada, especialmente con su gorrión que diariamente le informaba de todo lo que estaba sucediendo a su alrededor.
Sólo basta una imagen, como la de esas bandadas de estorninos, formando como estrategia de supervivencia la forma de un enorme pájaro, para perder la razón. Sólo basta imaginarse a un genio como Mozart corrigiendo sobre el papel el canto de su estornino para también acercarse al delirio.
Las aves fueron creadas para registrarlo todo, para servir como los ojos del cielo. Los pájaros nos han estado observado desde que el mundo es mundo, en las alturas y desde todas las ópticas posibles y podrían decirnos cosas que nos dejarían seguramente perplejos. Todas las preguntas que el ser humano se ha planteado sobre la verdad del mundo, sobre su origen, sobre la iluminación, tienen su respuesta en el cielo y las criaturas que lo habitan son los únicos guardianes del secreto. El rey Salomón debía su enorme sabiduría a la comprensión que Dios le otorgó del lenguaje de los pájaros, lástima que todo este fantástico conocimiento se haya desvanecido, de no ser así, quizás en estas páginas escribirían, golondrinas, palomas o alondras de plumas verdaderas y le daríamos la razón a Juan Ramón Jiménez cuando se preguntaba: Los pájaros, ¿Qué son sino poetas?
En esta edición de Litoral donde hay un Avecedario de la A a la Z con todos los pájaros posibles dentro de esa jaula que son los límites espaciales de esta publicación, también encontraremos partes de su anatomía, sus ojos, sus picos, sus plumas y alas. De su hábitat, con nidos, alambres y ramas, hasta sus huellas. en la arena o en la cabeza de grandes personajes o en compañia de grandes actrices.
También hemos destacado de una forma especial esas bandas sonoras que son sus cantos, su influencia en músicos desde a Antonio Vivaldi a Bob Dylan que nos decía que nadie es libre, que hasta los pájaros están encadenados al cielo, en cambio Leonard Cohen buscaba su libertad «como un pájaro en el alambre».
Los creadores han estado siempre observándolos. escrutándolos. porque han sido el modelo perfecto a seguir. Y ahí está la poesía y la aeronáutica para demostrarlo.
Lorenzo Saval